la jurisdicción especial para la paz, es un gran reto de carácter penal, en un país que lleva inmerso en la injusticia y por ende en la impunidad mas de 50 años, precisamente a manos de las FARC quienes son pieza de este ente, que desde sus inicio muestra que no es competente y corrobora lo endeble que es, al no mostrar con hechos reales y no con suposiciones o declaraciones publicas, la razón por la que fue creado y es para la reparación de victimas.

ahora bien, pretender que los delincuentes de corbata sean sujetos a esta jurisdicción especial, es un claro ejemplo de las fallas internas y la flexibilidad de los estatutos de su creación, pues si su origen es para reparar a la victimas, no se puede revictimizar a las mismas ayudando a la impunidad y a esconder delitos de grandes magnitudes.